El nuevo arzobispo habla francés, italiano y catalán y, respecto a este último, ha dicho que “hablo un catalán malo, como lo hablan en mi pueblo, chapurreao, pero me acaba de entrevistar un periodista catalán y dice que lo hablo bien”, ha bromeado.
Omella: “Hablo un catalán malo, como lo hablan en mi pueblo, chapurreao”